sábado, 6 de noviembre de 2010

UNA VELADA DE BOXEO CON MAYÚSCULAS

Excelente velada celebrada en el Polideportivo Dehesa Boyal de San Sebastián de los Reyes (05/11) organizada por Rimer Box y por el Club Deportivo Barceló, en la que se vieron apasionantes combates ante un recinto lleno de público entusiasmado. El cartel ya olía a éxito.

El colofón a una noche excitante vino de la mano de Giovanni Jaramillo, que opositaba al título UE del peso gallo en poder del belga Stephan Jamoye . Un combate impresionante, de los que el público vibra de principio a fin. Jamoye salió como una manada de búfalos, imponiendo un ritmo brutal de golpeo, y Jaramillo, extrañamente a su boxeo habitual, aceptó la invitación, y de ahí al final hubo un intercambio constante de golpes. Fue increíble como los dos púgiles aguantaron un ritmo tan infernal. En el undécimo asalto Jaramillo cayó a la lona roto por el cansancio, más que por los abundantes golpes recibidos, que encajó aparentemente. Fin del trayecto, derrota por KOT, en una pelea igualada con ligera ventaja final para el campeón.
Jaramillo boxeó con la dificultad de haberse lesionado el bíceps desde el segundo asalto y ello pudo cambiar su estrategia, aunque creemos que entró en un terreno minado, que el belga es un robocop, un durísimo boxeador, y que si bien el español también pudo haber ganado, Jaramillo entró en un
combate-sorteo en el que no podía poner sobre la mesa sus buenas cualidades técnicas. Debió haber buscado más el boxeo exterior, su buen sentido de la anticipación y desplazamientos para ir ganando asaltos, pero Jaramillo, a pesar de la derrota, salió fortalecido al mostrar una casta, un coraje y una fortaleza extraordinarias.

En el otro combate más esperado, el de semifondo, Iván Ruiz Morote desenchufó a Karim Quibir en segundos. Esperábamos una pelea cruda y disputada, pero Morote colocó una izquierda seca en los primeros instantes del combate, y Quibir no pudo hacer más que tambalearse, siendo parada la pelea acertadamente por el árbitro. Morote da un paso muy importante en su carrera tras esta victoria ante un púgil de la calidad de Quibir.

En el resto de combates, y por orden cronológico, el asturiano Alejandro Rodríguez Pereira demolió en un round al catalán Joan Josep Gallart, que perdió por K.O. en el primer asalto tras recibir un potente castigo redondeado con un croché al parietal.

El madrileño Rubén Nieto , que lleva una carrera embalada, venció por K.O. en el segundo asalto al marroquí-catalán Mehdi El Amar, que luchó lo que pudo hasta que le llegó una cuchillada penetrante al hígado que le obligó a escuchar la cuenta completa.

El Flaco Joaquín Céspedes hizo una buena pelea ante el brasileño Roberto Santos de Jesús. El americano dejó hacer al español, intentando contragolpear en las cuerdas. Céspedes se hinchó de golpear a su adversario, que sin respuesta aparente, vio cómo el árbitro paraba el combate en el tercer asalto.

En el primer enfrentamiento directo de la noche Rimer Box-Barceló, Alex Mora consiguió el primer punto para las huestes de José Valenciano (al final de la noche empate, Morote y Mora vencieron por el Barceló, y Daniel Pérez y Antonio Rodríguez liderando las tropas de Ricardo Sánchez Atocha).
El dominicano Mora salió a por todas, presionó mucho ante un demasiado tranquilo Jorge Pérez “Coke”. El mallorquín reaccionó, pero Mora siguió su trabajo basado en una excelente preparación física y venció por KOT. en el quinto asalto.

El madrileño Antonio Rodríguez “Chiky” con confianza y precisión, se deshizo de José Arturo Blanco por KOT. en el sexto asalto. Chiky fue mejor desde el principio, colocó las manos con buena puntería y fue llevándose la mayoría de asaltos ante un Blanco apático. En el último asalto un magnífico croché de izquierda, uno de los golpes de la noche, acabó con la pelea a pesar del intento de recuperarse de Blanco ante los brazos elevados del árbitro.

Por último, el púgil local Daniel Pérez Salido consiguió una brillante victoria por KOT. en el tercer asalto ante el ecuatoriano Carlos Caicedo. Salido controló al americano al principio, y después le derrotó con clase y constancia. Una buena victoria del madrileño ante el púgil del Barceló.

Escrito por Emilio Marquiegui

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