El púgil madrileño Rafi Zouheir representará a España en la mayor competición de Muay Thai o boxeo tailandés, el Isuzu Thai Fight 2010, que dará comienzo este domingo en Bangkok y en el que se enfrentará la elite mundial de este arte marcial.El evento, reservado hasta este año a luchadores locales, enfrentará al campeón tailandés, Petchmonkong Petchfocus, con el mejor especialista de otros quince países.
La organización, el Canal 3 de la televisión tailandesa que celebra su 40 aniversario, no ha ahorrado en esfuerzos para seleccionar a las primeras espadas de esta modalidad tradicional de lucha ni para dotar al ganador con un premio récord de 2 millones de bat (63.848 dólares o 50.193 euros).
“Por magnitud, federaciones implicadas, calidad de participantes, premios. Por todo. Este es el campeonato más importante en la historia del Muay Thai. Es como un campeonato del mundo para el fútbol”, aseguró Zouheir quien se muestra confiado con sus posibilidades.
“Hay diez participantes del máximo nivel. Creo que estoy entre ellos y mi ambición es quedar entre los dos primeros, llegar a la final. Una vez ahí, ganar sería más fácil porque ya se habría hecho casi todo el trabajo”.
Zouheir empezará su andadura enfrentándose en octavos de final al alemán Bartosz Koscielniak con el objetivo de llegar a la final, que se disputará el 6 de diciembre en uno de los actos de celebración del cumpleaños del Rey Bumibhol Adulyadej.
“Tengo un primer rival muy peligroso. Pero estoy bien preparado, me siento muy fuerte y sólo pienso en la victoria”, dijo.
Desde hace dos meses Zouhier se prepara intensamente entrenando seis horas diarias y vigilando la dieta para mantener el peso de 67 kilos, algo inferior al suyo habitual.
En las últimas semanas el púgil español se trasladó a Bangkok para continuar su preparación en el gimnasio Sasiprapa, donde otros siete españoles se entrenan a diario.
“Veo a Rafi con muchas posibilidades de ganar. Está muy fuerte”, dice el catalán Pitu Sans, campeón de España desde 1995 a 1997, y que desde hace seis años ejerce de mánager de los españoles que quieren instalarse en la capital tailandesa para practicar este deporte.
Zouheir, de 32 años, lleva media vida dedicado al Muay Thai, los últimos diez años como profesional, período durante el cual logró ser campeón del mundo por el World Muaythay Council y ser seleccionado en la segunda edición del Asia Contender.
No es un desconocido para el público tailandés que ya le ha visto en tres ediciones en el campeonato que se organiza con motivo del cumpleaños del monarca con un balance de dos derrotas y una victoria.
Para el púgil, conseguir el campeonato no sería sólo un logro personal sino también una manera de reivindicar la atención de las autoridades deportivas españolas hacia esta disciplina.
“Antes de retirarme ojalá el Muay Thai tenga el reconocimiento que se merece. Tenemos medallistas de Europa y del Mundo que lo consiguieron con unos medios irrisorios”, se lamenta.
Sans comparte este punto de vista y apunta que el problema se encuentra en que el Muay Thai no tiene en España una federación propia sino que depende de la de Kickboxing, modalidad de la que se distingue por admitir el uso de codos y rodillas.
“A nivel internacional sólo se reconocen federaciones exclusivas de Muay Thai. Luego, tenemos muy poco apoyo. La gente que quiere venir aquí a entrenar y competir no tiene ninguna ayuda”, dice Sans quien ayuda a púgiles españoles a instalarse en Bangkok y a encontrar combates.
Más allá de los éxitos deportivos, la esperanza de este colectivo se encuentra en los Juegos Olímpicos de Artes Marciales de Pekín que empiezan hoy y en el que se prevé que el Comité Olímpico Internacional reconozca el Muay Thai como deporte olímpico.
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